miércoles, 22 de abril de 2015

ACTIVACION DE LA CAMARA SECRETA DEL CORAZON

En tu interior, en la paz que buscas dentro de ti.

Comienza a respirar  lenta y tranquilamente.

Observa como tu cuerpo se relaja y tu mente se aquieta.
Respira de esta forma hasta que ésta salga naturalmente a tu propio ritmo, sin exigirte, solamente fluye en cada respiración dejando fuera toda preocupación.

Siente como la energía te recorre desde la cabeza hasta los pies, y en cada respiración la conduces por tu campo unificado.

Inhalando desde la cabeza como los delfines, comienzas a abrir todo canal receptivo de vibración, permitiendo que la conexión con tu espíritu sea en forma fluida y armoniosa.
A través de la intención activa tu corazón en luz y permite que se expanda en él, la luz blanca del amor incondicional,  y reconócete como un ser de luz.

Una vez que sientas el impulso de expansión activas tu columna vertebral como una antena de luz y llevas la intención a la reconexión con tu ser superior.
Observa cómo descienden filamentos de luz blanca incandescente del conocimiento y comienza a ingresar por tu chacra corona expandiéndolo, purificando y balanceando este vórtice de energía, a través de tu cabeza …

Intenciónala, dirigiéndola a la reconexión y expansión de la glándula pineal, nuestro tercer ojo.
Desde este punto activas en la espina dorsal las primeras 6 vertebras visualizándolas en luz, accionando en consciencia la luz blanca poderosa del conocimiento, los rayos cósmicos se activan y te conectas a todo el sistema nervioso del  cuerpo físico y tu cuerpo emocional.

Observa como tu espina dorsal se enciende entretejiéndose con fuerza con los filamento de luz y activas las siguientes 13 vertebras en luz, sostenidas por la fuerza de los filamentos de luz.
Ahora permites que los filamentos comiencen a entretejer tu cuerpo físico dirigiéndose a cada órgano, a cada estructura, sistema, llegando a las células y a cada cadena de ADN, encendiéndola en la luz más sutil que puedas reconocer en ti.

Una vez más observa como siguen descendiendo los filamentos de luz reconectando las siguientes 13 vertebras permitiendo que la luz blanca de la hermandad se entreteja en ellas.
Siente como la columna vertebral se ha activado en luz como una antena y comienza reconectar toda la matriz de tu cuerpo mental y emocional.

Al respirar observa cómo tu espina dorsal respira luz y al exhalar envías esta luz a todo tu campo unificado, viendo los chacras o vórtices energéticos expandirse y todo tu cuerpo electromagnético activarse en una sutil y poderosa vibración.
De esta manera activas tu campo de acción en todas direcciones y dimensiones.

Activas la última vertebra en el coxis y expandes los filamentos hacia tus piernas y pies.
 Ya estas conectado a la luz de tu quinta esencia y permites que en cada filamento descienda la chispa divina de tu ser, esa energía prístina que eres y la anclas en cada átomo de tu cuerpo, permitiendo que sea depositado en él esta energía divina de tu ser.

Tomando consciencia de tu ser y la totalidad, a través de tu pensamiento exhalas por los pies procurando que estas fusionándote  con el espíritu de la madre Tierra GAIA, observando todo fluir sin detenerse, comienzas tú a fluir en la macro orbita de la creación y ves que la fuerza de la creación traspasa todo tu ser, toda tu unidad.
Abres los canales de energía y la luz fluye en todo tu campo unificado moviendo todo estancamiento, toda enfermedad, toda matriz condicionada y liberas todo implante que distorsione la luz blanca del conocimiento.

Repitiendo este ejercicio de respiración comenzarás a trabajarlo en el sentido contrario y recibirás la conexión del universo físico por medio de la conexión con el corazón de la madre Tierra, comienzas a reconocerte como su obra biológica, contenido en la fuerza de sus elementos y los invocas uno a uno, Fuego, Aire, Agua, Tierra; sin importar el orden, sólo reconociendo su composición en ti.
Y vas visualizando como estas fuerzas van subiendo por los pies a la reconexión con tu espina dorsal, enraizando toda fuerza de la creación.

Permite que esta fuerza se manifieste en los filamentos de luz llegando a todos tus cuerpos y observas su manifestación en cada átomo, rodeando a la chispa divina cuatro chispas de luz la sostienen y forman un pentagrama de luz armonioso y luminoso, entregando el equilibrio perfecto en toda composición de tu ser.
Toma conciencia de los reinos mineral, vegetal y animal con raza Humana y permite que los flujos de energías se entrelacen en cada dimensión o Reino.

De esta manera podéis trabajar una limpieza profunda de renovación energética desde la madre Tierra y desde tu Ser Supremo que está conectado al Sol Central de la creación.

Observa como tu ser de luz comienza a activarse, mientras  entras en un estado de auto contemplación. Sigue fluyendo…
Después de este proceso, comienzas a visualizar cómo todo tu cuerpo comienza a respirar e

Inhalar energía a través de cada campo electromagnético y entramado energético,  transformándose en un pulso consiente de vida.
Observas, al inhalar, que todo tu ser se contrae en tu corazón como si fueras una partícula de luz que es la chispa divina, y al exhalar te expandes tu esencia sin limites, más allá de tu cuerpo físico, más allá de tu lugar físico, tomando conciencia de cómo todo esta conciente y conectado.

Te fusionas en ello, plantas, animales, estructuras, edificación, etc. todo esta hecho de la energía.
Repite, una vez más, inhalando y contrayendo en tu corazón, en esa diminuta chispa, toda la energía que has alcanzado y vuelve a exhalar repitiendo el  ejercicio expandiéndote aún más; toma la libertad de visualizarte más y más allá, de tu vecindario, de tu ciudad, de tu país, de tu continente y de este mundo hacia el sistema solar, sin límites,

Abres los canales de energía y la luz fluye en todo tu campo unificado moviendo todo estancamiento, toda enfermedad, toda matriz condicionada y liberas todo implante que distorsione la luz blanca del conocimiento.
Repitiendo este ejercicio de respiración comenzarás a trabajarlo en el sentido contrario y recibirás la conexión del universo físico por medio de la conexión con el corazón de la madre Tierra.

Comienzas a reconocerte como su obra biológica, contenido en la fuerza de sus elementos y los invocas uno a uno, Fuego, Aire, Agua, Tierra; sin importar el orden, sólo reconociendo su composición en ti y vas visualizando como estas fuerzas van subiendo por los pies a la reconexión con tu espina dorsal, enraizando toda fuerza de la creación.
Permite que esta fuerza se manifieste en los filamentos de luz llegando a todos tus cuerpos y observas su manifestación en cada átomo, rodeando a la chispa divina cuatro chispas de luz la sostienen y forman un pentagrama de luz armonioso y luminoso, entregando el equilibrio perfecto en toda composición de tu ser.

Toma consciencia de los reinos mineral, vegetal y animal con raza Humana y permite que los flujos de energías se entrelacen en cada dimensión o Reino. De esta manera podéis trabajar una limpieza profunda de renovación energética desde la madre Tierra y desde tu Ser Supremo que está conectado al Sol Central de la creación.
Observa como tu ser de luz comienza a activarse, mientras entras en un estado de auto contemplación. Sigue fluyendo…

Después de este proceso, comienzas a visualizar cómo todo tu cuerpo comienza a respirar e inhalar energía a través de cada campo electromagnético y entramado energético, transformándose en un pulso consiente de vida.
Observas, al inhalar, que todo tu ser se contrae en tu corazón como si fueras una partícula de luz que es la chispa divina, y al exhalar te expandes sin limites tu esencia, más allá de tu cuerpo físico, más allá de tu lugar físico, tomando conciencia de cómo todo esta consciente y conectado.

Te fusionas en ello, plantas, animales, estructuras, edificación, etc. todo esta hecho de la energía.
Repite, una vez más, inhalando y contrayendo en tu corazón, en esa diminuta chispa, toda la energía que has alcanzado y vuelve a exhalar repitiendo el  ejercicio expandiéndote aún más;

 Toma la libertad de visualizarte más y más allá, de tu vecindario, de tu ciudad, de tu país, de tu continente y de este mundo hacia el sistema solar, sin límites, repítelo tantas veces como sea necesario hasta alcanzar esta comprensión de ser parte del todo.
Una vez que te sientas parte de la totalidad del cosmos inhalas y traes toda esa energía hacia tu chispa divina en el corazón y al exhalar observa cómo esta chispa comienza a llenarse de ese caudal de energía de esa totalidad, expandiéndola, asumiendo tu chacra cardíaco como una esfera de luz, así verás tu corazón que comienza a expandirse, y en cada respiración éste va creciendo más y más.

 Todo converge en ti, hasta llegar a cubrirte totalmente.
Ya has expandido lo que llamamos la ‘cámara secreta del corazón’, este es tu templo sagrado.

 Es el lugar de conexión hacia tu maestro interno; hacia la presencia YO SOY.
Has tomado consciencia de tu vehículo de ascensión Mercaba.

Ahora activado, comienzas a fusionarte con él, unificando los campos de acción en una totalidad o un solo campo unificado.

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